¿Quieres saber cómo limpiar ventanas de aluminio blanco y conseguir que brillen como el primer día? Si tienes este tipo de ventanas en tu casa u oficina, sabrás que con el paso del tiempo pierden su color y acumulan suciedad.
Como empresa de limpieza en Madrid, te vamos a dar algunos consejos prácticos y efectivos para que limpies tus ventanas de aluminio blanco y logres mantenerlas en perfecto estado. Aplica cada una de nuestras recomendaciones y haz que tus ventanas se conviertan en el orgullo de tu espacio.
¿Por qué se ensucian las ventanas de aluminio blanco?
El aluminio es un material muy resistente y ligero, que se utiliza mucho en la fabricación de ventanas, puertas y otros elementos de carpintería metálica. No obstante, el aluminio blanco se ensucia con facilidad y requiere de un cuidado especial para evitar que se deteriore.
Las principales causas de la suciedad en las ventanas de aluminio blanco son:
- La exposición al sol, la lluvia, el viento y la contaminación ambiental, provoca que el aluminio se oxide y se decolore.
- El contacto con el agua, el jabón, el cloro y otros productos químicos, dañan el recubrimiento protector del aluminio y dejan manchas.
- El polvo, la grasa, el humo y otros residuos que se adhieren a la superficie del aluminio y forman una capa de suciedad difícil de quitar.
- El uso de utensilios o productos inadecuados a la hora de limpiar, rayan el aluminio y alteran su aspecto original.
Así mismo, las ventanas de aluminio blanco son habituales en muchos espacios de trabajo, por lo que su limpieza y mantenimiento deben incluirse en los protocolos de limpieza de oficinas. Además de mejorar la estética del lugar, mantener estas superficies en óptimas condiciones contribuye a crear un ambiente más luminoso y agradable.
Cómo limpiar ventanas de aluminio blanco ennegrecido
Uno de los problemas más comunes que presentan las ventanas de aluminio blanco es que se vuelven de un color grisáceo o negro, debido a la oxidación del metal. Esto ocurre sobre todo en las zonas más expuestas al exterior, como los marcos, las bisagras o los tiradores.
Productos necesarios para limpiar ventanas de aluminio blanco
Antes de comenzar, reúne los siguientes artículos de limpieza:
- Un cubo con agua tibia
- Un trapo suave o una esponja
- Un cepillo de dientes viejo
- Vinagre blanco o zumo de limón
- Bicarbonato de sodio
- Un paño seco o de microfibra.
Ten en cuenta que la limpieza de cristales y marcos debe realizarse con materiales no agresivos, a fin de evitar daños en la superficie.
Pasos para limpiar ventanas de aluminio blanco ennegrecido
- Mezcla en el cubo de agua tibia una parte de vinagre blanco (o de zumo de limón) por cada cuatro partes de agua. Estos productos son naturales y tienen propiedades desinfectantes y desengrasantes. Te ayudarán a eliminar la suciedad y el óxido del aluminio.
- Humedece el trapo suave o la esponja en la solución y frota con suavidad las zonas ennegrecidas de las ventanas. No uses estropajos o esponjas metálicas, ya que podrían rayar el aluminio.
- Si hay manchas o zonas muy oxidadas, espolvorea un poco de bicarbonato de sodio sobre ellas y frota con el cepillo de dientes viejo. El bicarbonato es un abrasivo suave que actúa como blanqueador y neutraliza los ácidos del vinagre o del limón.
- Enjuaga con agua limpia y seca con el paño seco o de microfibra, así evitar que queden marcas o restos de humedad.
Cómo limpiar los cristales de las ventanas de aluminio blanco
Además de limpiar el aluminio, es fundamental saber cómo limpiar los cristales de las ventanas correctamente. Si quieres dejarlos transparentes y sin huellas, toma nota de las siguientes recomendaciones.
Materiales necesarios
- Un cubo con agua tibia
- Un chorrito de amoniaco o de alcohol
- Un trapo suave o una bayeta
- Un limpiacristales o un periódico.
Pasos para limpiar los cristales de las ventanas de aluminio blanco
- Mezcla en el cubo de agua tibia un chorrito de amoniaco o de alcohol. Estos productos son desinfectantes y desengrasantes, que ayudarán a eliminar la grasa de los cristales.
- Humedece el trapo suave o la bayeta en la solución y limpia los cristales con movimientos circulares. No uses papel de cocina o servilletas, ya que podrían dejar pelusas o restos de papel en los cristales.
- Seca los cristales con el limpiacristales o el periódico, eliminando las posibles marcas o rayas. El limpiacristales es un utensilio que tiene una goma que arrastra el agua y la suciedad de los cristales. Por su parte, el periódico es un material que tiene tinta y celulosa, actuando así como abrillantadores y pulidores de los cristales.
Estos consejos también son aplicables para la limpieza de comunidades de vecinos, donde las ventanas de aluminio blanco son muy comunes y requieren un mantenimiento constante.
Cómo limpiar ventanas de aluminio blanco por dentro
La limpieza de la cara interior de las ventanas de aluminio blanco resulta más sencilla en comparación con la parte exterior, dado que está menos expuesta a los agentes externos como la contaminación, la lluvia o el polvo.
No obstante, te recomendamos que limpies periódicamente esta superficie. De esta forma, previenes la acumulación de mugre o grasa en el interior de las ventanas, lo que podría empañar su aspecto y dificultar la entrada de luz natural.
Para limpiar las ventanas de aluminio blanco por dentro, puedes usar los mismos materiales y pasos que en la limpieza de las ventanas por fuera, pero con menor frecuencia e intensidad. Es decir, utiliza los mismos productos de limpieza, pero no hace falta que frotes tanto ni que enjuagues tanto, ya que la suciedad será menor.
Si quieres saber más sobre cómo limpiar ventanas de aluminio, lee este otro artículo de nuestro blog.
Cómo mantener las ventanas de aluminio blanco limpias y cuidadas
Si quieres que tus ventanas de aluminio blanco luzcan siempre impecables, y no tengas que hacer una limpieza profunda cada poco tiempo, te recomendamos que sigas estos consejos:
- Limpia las ventanas de aluminio blanco al menos una vez al mes, o cada vez que veas que están sucias o manchadas.
- Evita el contacto directo del aluminio con cualquier producto químico que dañe su recubrimiento o su color.
- Protege las ventanas de agentes externos: coloca cortinas, persianas, toldos o cualquier otro elemento que resguarde las ventanas del sol, viento, lluvia o contaminación.
- Revisa el estado de las ventanas de aluminio blanco con regularidad. Si observas que tienen algún desperfecto, repáralas lo antes posible o sustitúyelas por unas nuevas.
En definitiva, saber cómo limpiar ventanas de aluminio blanco de forma efectiva y regular es vital para mantenerlas en óptimas condiciones. Siguiendo estos sencillos pasos, tus ventanas lucirán impolutas y aportarán una imagen de pulcritud a tu hogar u oficina. Y si necesitas ayuda extra, recuerda que en Crespo Mantenimientos somos expertos en limpieza y estaremos encantados de asesorarte. ¡Que tus ventanas brillen con luz propia!
